La crítica pasa y la conveniencia queda en casa

Por:  Miriam Rizcalla de Cornejo


Leyendo las noticias hoy, me encuentro a Olimpo Sáez, miembro fundador del partido Molirena, furioso, diciendo que el presidente Martinelli ha "secuestrado" al partido del gallo, y a mí se me antoja pensar que si no lo secuestró, ¡lo compró!  De pronto y se lleva el  Guinness al sancocho más grande del mundo, con todos los gallos del Molirena...

En mi Soná, nuestro H.D.  Héctor Aparicio, un gallo muy querido, respetado y siempre ganador, ¡saltó del corral!...un gallo al que muchos, familias enteras, alimentamos desde que era un pollito con nuestros granos de maíz (votos), hasta verlo crecer fuerte y muy gallardo, y de pronto ¡zaz!, se voló del patio, dejando al resto de sus congéneres sin su líder:  "el gallo kikirikí"...Esto me recuerda tanto mi cuentito de Un gallo llamado Uno, víctima de las bicheras de Soná!...

Con lo que estamos viendo en el presente, queda claro que todo aquello de los principios partidistas, y no sé qué tanta cosa,  no es más que una farsa, un teatro, donde el único argumento que realmente cuenta son los intereses propios, así es como vemos tanta saltadera de todos los partidos hacia el Cambio Democrático (CD).  Parece que a muchos les llegaron al precio, adquisiciones muy buenas y de bajo monto, bueno, de eso se trata, así es como funcionan los negocios, comprar barato y sacar ventaja.  Sólo unos pocos habrán salido costosos, el resto ¿?...¡Qué más da, por un dólar o un millón...sigue siendo igual!  ¿Será que todos tenemos un precio?...  

De no continuar el CD en el poder, ya hemos de ver el retorno de "los hijos pródigos" a sus toldas tradicionales, digo, a sus casas, arrepentidos de su rebeldía, claro que siempre estarán los buenos padres, amorosos y misericordiosos, para recibirlos con los brazos abiertos y un gran banquete para celebrar...

Mientras tanto, cada uno verá por su acomodo, no importa qué, no importa quién, fieles al principio de que la crítica pasa, y la conveniencia queda en casa...