Mis Bodas de Porcelana

Tradicional caminata

Por:  Miriam Rizcalla de Cornejo

Parece que fue ayer que Eduardo y yo nos casamos, veinte años han pasado desde entonces...

La iglesia San Isidro testigo eterno de aquel día...

El recorrido tradicional por las calles del pueblo, mi mami, mi papi, mis hermanos, mis suegros, cuñados, la sobrinera junta, la familia toda...algunos que hoy ya no están...

Un nuevo empezar, un constante caminar...caminante no hay camino, se hace camino al andar, y juntos lo hicimos, y seguimos andando, descubriendo nuevos paisajes, en cada día un nuevo amanecer...

Dos hijos maravillosos, nuestro mayor tesoro, qué bendición!  Mi Eduardito (18), mi Melina (13), si tan sólo me animara a contar tantas cosas...pero no, no diré nada, sólo una cosa:  Gracias.  Gracias Señor...